La religión sólo es útil si sirve para generar certezas con las que rellenar fácil y rápido los inabarcables vacíos del conocimiento humano, con ese gran parche llamado Dios. Dado que Mi existencia se fundamenta en el desconocimiento, es lógico que cuanto más grande es lo ignorado, mayor es la estupefacción creada y más irresistible es la tentación de buscar tan recurrente atajo. El hecho de que el avance del conocimiento vaya acompañada de un continuo repliegue en Mis posiciones, algunas tan añoradas por los de Mi gremio como eran las de dar sentido al día y a la noche, en ningún caso debe haceros llegar a la dañina conclusión de que esa tendencia es irreversible, ya que podría llevaros a poner en duda vuestra necesaria fe. Ante todo nunca hay que rendirse y nuestro favor juega el hecho de que el avance de la insolente ciencia la va llevando cada vez más cerca de los límites de la capacidad de comprensión humana, surgiendo a su vez nuevos, fascinantes y acogedores vacíos en los que Yo siempre tendré cabida, aunque sea sólo de forma temporal. Poco importa a quienes en su necesidad de creer el hecho de que Yo, ese Gran Ingeniero hacedor de las sublimes leyes y constantes físicas, sea tan infinitamente arrogante, indolente, sádico y olvidadizo siempre que tenga unos gustos tan cutres y humanos como los que caracterizan a Mi religión. Al fin y al cabo, esos gustos son el componente más demandado por quien ansía creer.
Es completamente necesario que Mi Iglesia siga oponiéndose al avance científico en la medida de sus posibilidades y, cuando cuando este amenace con desauciarme nuevamente de cualquiera de Mis vastos dominios, ha de seguir con su ejemplar labor de reinterpretación parcial de lo conocido y de realojo en los nuevos vacíos originados, siempre negando este repliegue de posiciones que podría ser tan mal entendido.
Nunca os olvidéis de que Yo soy quien ha de rellenar los vacíos del conocimiento, hijos Míos, la única y auténtica personalización de la Ignorancia, por mucho que otras deidades impostoras hayan servido o puedan servir para realizar esa misma función.